La adquisición de la lecto-escritura es un proceso complejo que involucra la participación de las funciones cerebrales superiores ( Lenguaje, gnósias y práxias); definidas por Azcoaga1 como el conjunto de actividades fisiológicas que ocurren al nivel de sistema nervioso central y se constituyen en elementos esenciales para la adquisición del código lecto-escrito, puesto que su adecuada maduración, desarrollo y posterior estabilización depende la adquisición de habilidades y destrezas necesarias para los actos de leer y escribir.